Pedro Linares, Luis Rouco, Pablo Rodilla y Tomás Gómez son los autores de este informe que recoge los principales retos y políticas necesarias para orientar de forma adecuada la transición hacia la descarbonización del sector eléctrico a nivel global, con las particularidades en el caso español.
El estudio se divide en cuatro grandes bloques. Pedro Linares presentó los escenarios futuros. Luis Rouco los retos técnicos para la estabilidad del sistema. Michel Rivier, centró su exposición en el despacho y organización de mercados y Tomás Gómez en los costes y tarifas.
El objetivo a 2050 es conseguir la neutralidad de emisiones, lo que requiere aumentar el peso de la electricidad, con una penetración, en España, de casi el 100% de las energías renovables. Sobre este escenario y a la pregunta de si es técnicamente posible y económicamente razonable, los autores pusieron el foco en la tecnología de respaldo para solventar el reto de la seguridad de suministro a corto y largo plazo. “El sistema funcionará siempre que tengamos una parte de generación síncrona, que en el caso europeo, se define en un 20%”.
Sobre cómo afectará a los precios esta mayor penetración de energías renovables, expusieron una presión a la baja, junto a una mayor volatilidad y algunos picos en los precios (precios de escasez y mayor coste en la generación térmica de respaldo). En los mercados marginalistas, los generadores eficientes recuperarían los costes de inversión (mix óptimo). Destacaron los mecanismos de capacidad como solución en este escenario. Abogaron por un modelo de suministro firme para España, denominado “opción financiera de fiabilidad”.
En relación a los costes, precios y cargos, indicaron la importancia que cobra el consumidor al poder gestionar los recursos energéticos. El diseño de las señales de precios, será clave para que el mercado utilice estos recursos de forma eficiente. Como recomendación, citaron la neutralidad tecnológica, con reflectividad de costes y equidad en los precios. Para España, apostaron por una metodología de peajes y cargos. “La tarifa no se fija, se calcula”.
A continuación, tuvo lugar una mesa de debate con representantes de empresas, asociaciones y organismos reguladores del sector, en la que participaron, por orden de intervención: Acciona, ACE (Asociación de Consumidores de Electricidad), EDP, Endesa, Iberdrola, OMIE, REE, Repsol Electricidad y Gas y Viesgo Renovables.
Las principales cuestiones abordadas fueron: la neutralidad tecnológica en las subastas, los contratos a largo plazo, la electrificación de la economía, seguridad de suministro y tecnología de almacenamiento, autoconsumo, fiscalidad ambiental, nuevos comportamientos en la demanda, reforma del sistema de tarifas en las redes, compartir los cargos entre las fuentes energéticas, la integración de recursos distribuidos, como crear liquidez en los mercados a plazo, precios competitivos, digitalización, distribución, PPAs o incentivos a la innovación.