Arcadio Gutiérrez, director general de Enerclub, introdujo a la conferenciante destacando su posición como miembro del grupo de expertos de la Cumbre de Cambio Climático e Innovación de la Advanced Leadership Foundation.
Castaño comenzó su intervención explicando el concepto de desarrollo sostenible que “satisface la demanda de las generaciones actuales, sin comprometer las necesidades de las generaciones futuras”. Está basado en tres elementos: la bioeconomía, la economía verde (medioambiente y emisiones bajas en carbono) y la economía circular (producción de bienes y servicios con el menor volumen de recursos naturales).
La economía circular supone pasar del modelo económico lineal (utilizar, producir, desechar) a un nuevo enfoque en el que se aprovechan mejor todos los recursos a través de su reutilización, reparación o reciclaje. Enumeró posibles riesgos de la economía lineal como pérdidas económicas y de residuos estructurales; volatilidad en los precios y suministros o el deterioro de los sistemas naturales.
La economía circular se inicia desde que se extrae la materia para producir, y hasta el producto final, donde todas las fases de transformación se pueden reindustrializar. Por lo tanto, indicó Castaño, “las oportunidades de competitividad, crecimiento económico o empleo, son enormes”.
Sobre los casos reales de éxito, mencionó las energías limpias procedentes de energías renovables; los procesos industriales menos contaminantes; el cultivo de precisión que ahorra energía, agua y fertilizantes; el aprovechamiento de residuos orgánicos para producir gas renovable, y la financiación verde.